No entiendo a la gente que olvida a sus afectos, que le hace la cruz de repente a gente que ha conocido desde siempre, sin haber una razón de fondo.
las amistades hay que cuidarlas, cultivarlas,después de todo,una buena amistad es una de las mejores cosas de la vida, para el que sabe apreciar eso.
Existe una mirada mezquina y nihilista, ya no se confía en el prójimo, se piensa en la otra persona como poco digna de confianza, se empieza viendo desde la negatividad, vale decir no se logran apreciar los dones y los valores del prójimo.
Todo ser tiene algo bueno en si mismo y todo ser tiene la capacidad de regalar eso bueno a las gentes de su aprecio y confianza.A veces perdemos ese venero, ese autentico tesoro,porque estamos obnubilados por nuestras pequeñeces, que tanto daño al alma nos hacen, pero es algo que nosotros mismos provocamos(se cosecha lo que se siembra)
